domingo, 29 de enero de 2012

Amasa la masa del 29




29, día de ñoquis. Cuando tenga una gran familia (cuándo?), dudaré de seguir esta tradición cada mes, pero por ahora, mis amigos se deleitan con mis invitaciones y yo con su compañía de domingo.

Para 4 personas que coman con gusto y gula, los ingredientes son:

1 kilo de papas (+ sal + nuez moscada y algo de manteca para hacer un puré)
300g de harina 000
sal fina
2 yemas
1 huevo
sal gruesa
hierbas a elección

Después de hacer un puré liso y sin grumos, esperar a que se enfríe.
Luego, hacer una corona, agregar los huevos y la harina + la sal, sin amasar demasiado. Pueden agregar algunas hierbas si les gustan, como orégano, salvia o romero.
Dejar descansar y cortar en círculos que ;luego se convertiran el largas tiras para ser cortadas en pequeños ñoquis. 
Calentar en una olla grande con abundante agua y dejar hervir. Cuando rompa hervor, agregar sal gruesa, y con cuidado, tirar los ñoquis y cocinar por no más de un par de minutos hasta que suban a la superficie.

Se pueden acompañar con distintas salsas, aunque a mí me gustan los clásicos con bolognesa.

Buen provecho y buena vida!

miércoles, 25 de enero de 2012

El órgano goloso: la boca


Los golosos conocemos el mundo desde la boca: lo leemos, lo besamos, lo chupamos, lo comemos, lo degustamos sin prisa, lo captamos compuesto. El homenaje goloso de Julio Cortazar en el capítulo 7 de Rayuela





lunes, 23 de enero de 2012

Recetario para cualquier inicio


1 noche de insomnio 
3 amigos insistidores
una pisca de talento
una computadora supersónica
2 lectores como mínimo


Una noche de insomnio y de verano, cálida para unos pocos, calurosa para la mayoría, mortal para una chica sinsueño, escribiente y golosa, uno comienza a dar vueltas en la cama. La primera vuelta refresca, la segunda te aguantás las ganas de prender la luz, la tercera tomás un buen vaso de agua y decidís que mejor será dejar de reprimir tu instinto e ir por fin hasta el teclado, un poco más de dos metros allá lejos,
Luego, una buena pisca de talento desperdiciado en algunas palabras blogueras, más esos tres amigos conectados y sonámbulos que te insisten en ponerte con el blog, dale, que eso merece una entrada, y eso otro también!
Y como yo soy entre tanto, una chica curiosa de recetas para complicarme la vida pero también soy una amiga que atiende reclamos varios, se me ocurre que la mejor manera de engolosinarnos todos es poner manos a la obra y ver si consigo los dos últimos lectores que pide mi receta iniciática de este enero. 
Et voilá, bienvenidos a mi almacén de golosinas y desvaríos casi fuera del horno...